Poco a poco empezamos ha hablar, conversaciones cortas,  sin fundamento, la gente murmuraba, decía, inventaba, y yo pensaba ojalá esas mentiras fueran ciertas algún día, ojalá estuviese a tu lado, tuve mis oportunidades de acercarme cada vez más a ti, pero era verte y que me temblasen las piernas, era oírte hablar y que me temblara la voz, y no poder decir otra cosa qué. <<No déjalo, aquí estoy muy bien>> y por dentro de mí se oía una voz que decía <<Eres idiota! estarías mejor a su lado entre sus brazos>> pero esa debilidad que tenía hacia él me podía era más fuerte que yo, y cuando quería rectificar ya era tarde.

Poco a poco empezamos a coger más confianza, ya me abrazabas y no me sentía extraña, rozaba tus labios sin que mis manos temblaran, pero ya era tarde, pensaba, tiene novia para que estas chorradas, pero era tenerle a mi lado escucharle, y pensar  A LA MIERDA LAS NOVIAS sí sólo me siento bien a su lado, y cuando por fin podía tenerte no eras de nadie, miles y millones de señales voces, me decían ya es tuyo, puede serlo si deseas, una apuesta me lo impedía.

Y me he dado cuenta, me he enamorado, no sentía esto hace mucho, es una sensación rara, diferente, y es que no puede vivir sin acariciarle suavemente. ¿Qué hago pienso? Nosé, me respondo a mi misma. Me va a hacer daño, prometí que no lo haría que no me enamoraría, pero por tí, todo el daño merece la pena. Por qué se que puedo vivir momentos únicos a tu lado, puedo ser quien siempre he soñado, puedo ser la princesa de ese cuento que siempre soñé. Me has enseñado que el amor es algo que merece la pena gracias.
Pero en vez de eso soy fuerte, te veo muchos días y todos pienso en poco esa sonrisa será mía.